Alicante
TRIBUNALES
Uno de los manteros declara que recibió presiones para implicar a los agentes
Dice que un mando le amenazó con imputarle falsos delitos y expulsarle
J. A. M.
Uno de los magrebíes que pusieron la denuncia contra los policías locales acusados de revender CD a los manteros se desdijo ayer ante la juez de estas acusaciones, y aseguró que había recibido presiones de los mandos para implicar a los agentes. El joven ya tiene una denuncia presentada contra los mandos por coaccionarle y que investiga otro juzgado de Alicante. La juez investiga si ésta era la persona a la que los dos principales agentes inculpados revendían los CD piratas decomisados. La declaración ante la titular del juzgado de Instrucción número uno de Alicante se prolongó más de una hora. Con esta comparecencia, la magistrada continuó ayer escuchando las declaraciones de los imputados por una presunta trama de reventa de CD falsificados por parte de funcionarios de la Policía Local de Alicante.
El magrebí, que declaró ayer ante la juez en calidad de imputado, negó ayer todas las acusaciones que dieron lugar a la apertura de la investigación por estos hechos. Según la versión que dio a la magistrada, sólo conocía a uno de los cuatro policías a los que implicó en la presunta trama de la reventa de los CD porque le compró una moto en 2005. Del mismo modo, este agente nunca le había requisado CD. Los motivos que esgrimió para justificar ese cambio en la declaración fueron que había recibido presiones de mandos de la policía local para que implicara a los agentes. Uno de estos mandos la había ense?ado las fotografías de los cuatro agentes que tenía que incriminar. Aunque sólo conocía a uno, el oficial no lo puso así en la declaración. Siempre según su versión, este mando ofreció 200 euros a él y a otros compa?eros y el compromiso de dejarles vender CD en la Explanada y en Babel a cambio de que implicaran a esos agentes.
El joven aseguró que el oficial le había dicho que tenía estacionada en la calle una furgoneta con más de 1.500 CD falsificados, y que si no acusaba a los agentes iba a decir que eran de él e iba a pasar varios días en la cárcel. Otras amenazas recibidas eran que no iba a permitir que su madre reabriera la carnicería que le habían cerrado días atrás, o que le iban a quitar los papeles y le iban a expulsar del país. Durante su declaración, no supo precisar los motivos por los que el oficial quiso que implicara a esos agentes en concreto y no a otros.
De todas maneras, antes de su declaración de ayer, el joven ya había presentado otra denuncia por coacciones contra mandos de la Policía Local por obligarle a implicar a los agentes. Este juzgado tomará declaración al mando acusado la semana próxima en la causa que tiene abierta.
Ayer estaban citados hasta cinco vendedores en el juzgado de Alicante, pero la mayoría de las declaraciones se suspendió. Por un lado, porque la mayoría de los testigos aún no ha podido ser localizada, y porque la magistrada quiere tomar declaración en primer lugar a los imputados en la causa.
Por otro lado, otro de los manteros que inicialmente prestó declaración culpando a los agentes municipales de la reventa de CD ha denunciado en la Comisaría de Alicante haber sido víctima de una agresión por parte de compatriotas. Al parecer, los atacantes le habrían golpeado con un martillo en la mano, pero no presentó parte de lesiones.