A. Origen
Por su naturaleza y objeto de estudio, la Teoría de Inteligencia Operativa Policial es bastante nueva, así como el mismo término. Se introduce por primera vez y esto hace que su definición sea de carácter estipulativa, nominal o verbal.
El definiendo (símbolo que se debe definir) de una definición estipulativa no tiene ningún significado aparte de la definición que lo introduce o anterior a ella. También, esto hace que la definición estipulativa no sea ni verdadera ni falsa. Tenemos la completa libertad de estipular el significado del término Teoría de Inteligencia Operativa Policial debido a que no existe ningún significado anterior.
Antes de definirla, queremos exponer algunas reflexiones en torno a la teoría y método de Inteligencia Operativa Policial con el propósito de fortalecer su entendimiento. Partimos de la premisa de que la comprensión de un concepto sólo se torna comprensible cuando el mismo es aclarado por quien lo utiliza.
Esta teoría fue elaborada por policías antiterroristas como guía y sustento de las operaciones de inteligencia que se desarrollaban para combatir el terrorismo capturando a sus jefes, cabecillas y dirigentes. La idea era apuntar a la cabeza de las organizaciones terroristas y causarle mayor daño en más altos niveles. En la práctica, esta teoría comprende dos partes o fases: Inteligencia e Investigación. Es por eso que afirmamos que la teoría es un proceso cuya dos fases (inteligencia e investigación) interactúan y se complementan.
La razón principal para crear la TIOPO fue la imperiosa necesidad que teníamos para combatir a las organizaciones terroristas renovando métodos de investigación debido a que a fines del 89 se hacía difícil penetrar en las organizaciones por su clandestinidad y compartimentaje y sujeción a la Regla de Oro (permanecer en silencio y no delatar, así lo despellejen vivos).
Era difícil llegar a los más alto niveles de la organización o "el partido" debido a esta clandestinidad y las medidas extremas a las cuales se sujetaban cada vez que realizaba sus "contactos" (Sendero) o "automáticos" (MRTA).
Entonces, la clandestinidad, el secreto y muchas veces la disciplina del enemigo, nos obligó a crear una nueva forma orgánica, sustentada en valores y principios y un método de investigación diferente, innovador, creativo. Se hizo imperativo contar con nuestra propia inteligencia, en forma puntual, exacta y oportuna.
Así, la policía antiterrorista que hasta fines de la década de los 80, había sido un ente que aplicaba defensa pasiva (esperar que vengan los detenidos o que los pongan a disposición) pasó a la ofensiva : Salir a buscar al delincuente en su madriguera, buscando selectivamente que coger a sus cabecillas, dirigentes, jefes, líderes.
Al final de la operación el golpe iba dirigido a la cabeza, al dirigente. De esta manera, el cuerpo, aunque sea demasiado grande, empezaba a tambalearse, perder el rumbo y su desarticulación er cuestión de tiempo. La primera fase, inteligencia, proporciona el conocimiento del enemigo en cuanto a estructura, modus vivendi, contactos, lugares de reunión, alojamientos, etc. En resumen, esta fase nos proporcionaba el conocimiento de su forma de "pensar", "sentir" y "actuar".
La segunda fase, investigación, empieza con las intervenciones (detenciones y/o capturas) luego se realizan los registros, el levantamiento de actas. Se perenniza la escena, el interrogatorio de inteligencia, se realiza las verificaciones y confrontaciones, las pericias, análisis de la documentación, etc.
La investigación nos permite ahondar y escudriñar más dentro de la organización del enemigo; es complementaria a la anterior y es como " la luz que aclara las sombras en que muchas veces navega inteligencia".
Muchas veces, cuando se empieza una operación de inteligencia, previa selección del blanco u objetivo, se desconoce hacia dónde se debe llegar o que parte de la organización es la que se está trabajando.
Investigación culmina con la elaboración del documento final(Informe, Parte o Atestado), que, conjuntamente con los implicados y los elementos probatorios del hecho, pasan a disposición de la autoridad judicial competente, en este caso el Fiscal Provincial como titular de la Acción Penal.
Lo novedoso en esta teoría y método es que las dos fases son cubiertas por la misma organización policial. Así se tiene a nuestro favor dos principios elementales en toda lucha: La oportunidad y la sorpresa. Trabajar así desconcierta al enemigo y se le coge desprevenido. No esperan que un día domingo, a las tres de la tarde o un lunes a las cinco de la madrugada, los sabuesos del GEIN, estén olfateando la presa.
Esto también permite disminuir los riesgos reducir los "costos" en cuanto a vidas e integridad física, tanto de los agentes como del adversario.
También, el hecho de que estas dos fases constituyen un circuito cerrado, permite neutralizar toda fuga de información o delación que puede poner en riesgo la seguridad de los agentes, de la organización y traernos abajo la operación de inteligencia que se desarrolla, con perjuicio del costo y tiempo invertido.
Además de este principio mantiene el secreto y compartimentado las operaciones. La sorpresa y la oportunidad, además de otros principios que se mencionan en la teoría tales como, seguridad, ofensiva, la paciencia, etc., son el sustento de la teoría.
Asimismo, el agente que aplica esta teoría, entre sus cualidades, debe poner en juego iniciativa, voluntad, audacia, valor y sacrificio, cualidades del renovado hombre policía, a los cuales se le agrega ingredientes fundamentales de técnica y procedimientos partiendo del conocimiento del enemigo (el conocimiento es poder ).
Cuando se elabora esta teoría se partió de una convicción acendrada: En toda lucha contra el crimen organizado, entre los que está el terrorismo, el narcotráfico, el secuestro, la corrupción, etc., antes de utilizar la fuerza, se debe emplear la astucia, la habilidad, la inteligencia. Este método permite establecer una diferencia con el adversario basado en la defensa y protección de la vida, la libertad y la democracia.
El agente de Inteligencia Operativa Policial debe aplicar una táctica flexible, adecuada a las circunstancias y aprender que el arte de las operaciones de inteligencia policial operativas consiste en saber esperar, asimilar la cambiante situación , estar siempre dispuesto a empezar de nuevo, en caso de cometer algún error, sin lamentaciones, y sin mirar hacia atrás, como no sea para sacar lección de la experiencia. Los errores son los precursores de los correcto y la madre del éxito.
En base a la teoría de inteligencia operativa se crea una organización que trabaja en función de alcanzar los objetivos, respetando los valores y los principios que en ella se menciona.
Esta organización debe ser moderna, tecnificada y previamente debe seleccionar al personal. El principal requisito es que piense como policía y adopte la actitud de un verdadero agente de inteligencia policial operativo: Proteger la vida, la libertad de las personas y la democracia, como dones preciados del ser humano. Que tenga capacitación permanente, teórica y practica, sin perder de óptica de que toda lucha contra el crimen organizado es en esencia un enfrentamiento de inteligencias, mentalidades y sentimientos.
Se debe tomar en cuenta las circunstancias y los personajes que intervienen en ella y el que dure un segundo más en la lucha, tiene mayores posibilidades de vencer.
B. Definición
La inteligencia operativa policial se ubica dentro de la Ciencia Policial y constituye en una nueva y superior forma de combatir el crimen organizado. Es una teoría y método de investigación contra el delito organizado que busca desarticular o neutralizar las organizaciones terroristas a través de la detención o captura de sus jefes, cabecillas o dirigentes a través de operaciones operativa de inteligencia policial.
Es el proceso de selección profesional de la información policial que conduce a obtener resultados positivos en una investigación. Es el conocimiento de un hecho, fenómeno, persona o cosa en general obtenido con un rigor científico y que tiene un grado óptimo de verdad o de predicción determinado para una finalidad específica, como elemento de juicio para adoptar decisiones.
Cuenta con valores (defensa y protección de la vida, la libertad y la democracia) que la sustenta y que la convierte en una arma de defensa de los Derechos Humanos.
Es la unión de la inteligencia más la investigación criminal que se sustenta en valores y principios, con características y una metodología propia, con procedimientos y técnicas innovadoras que busca desarticular a las organizaciones criminales capturando a sus cabezas, jefes, líderes o dirigentes.
Pero esta unión(inteligencia más investigación) no es rígido, también se puede dar entre la inteligencia y las operaciones psicológicas, depende de la estrategia del adversario.
C. Objetivo, finalidad y método
1. Objetivo
Proporcionar a la policía un conjunto de conocimientos sistematizados, técnicos y científicos, con aplicación práctica, para que puedan desarrollar y ejecutar operaciones de inteligencia con éxito, minimizando los riesgos.
2. Finalidad
Desarticular las organizaciones terroristas capturando a sus jefes, cabecillas, dirigentes, etc., aplicando el principio de "vencer sin luchar"(sin costos, reduciendo los riesgos).
3. Método
Sigue un planeamiento minucioso, por fases y etapas que empieza desde la selección de un objetivo, el conocimiento de la estructura orgánica, contactos, casas, indicios y evidencias, niveles dentro de la organización, modus operandi, etc. Luego viene las intervenciones y capturas, levantamiento de actas, manifestaciones, pericias, comprobaciones, análisis de lo incautado, responsabilidades, hasta la puesta a disposición de los implicados ante la autoridad del Fiscal con el informe, el parte o atestado respectivo.
"Haciendo de la paciencia un arte y de la espera una virtud", poco a poco, se va conociendo la estructura del adversario y la forma de pensar, sentir y actuar, hasta que en un momento dado, cuando la sorpresa y la oportunidad estén de nuestro lado, se procede a intervenirlos, capturando principalmente a los jefes, dirigentes o cabecillas de la organización, sin dejar de lado los valores: Respeto de la vida, la libertad y la democracia.
Está demostrado que un combatiente lucha mejor cuando cree en lo que hace y está fuertemente motivado en valores concretos, reales y que permiten establecer una diferencia entre él y el enemigo. El esfuerzo inspirado sólo por exigencias autoritarias o recompensas fijas refuerzan la oportunidad de victoria pero no son elementos cruciales.
Es indispensable que todo agente de inteligencia policial operativa se forje en la escuela del trabajo, en forma constante y tenaz.
Autor: D. Benedicto Jiménez Bacca
Web: www.benedictoinvestigador.8m.com